see you sun

See you sun

Recordaremos el primer baño del verano, los encuentros en casas de amigos, el olor a salitre y el rocío sobre la hierba verde. Recordaremos al sol avivando las fachadas y los colores que decoraban las heladerías.

Recordaremos los mejores atardeceres que jamás hayamos visto desde nuestros balcones, y cómo la luna y el sol compartían el mismo cielo, para hacer de los días una aventura y de las noches pura magia. Recordaremos el grupo de amigos con el que compartimos cientos de planes improvisados y aquellos a los que no pudimos visitar.

Recordaremos este verano como un tiempo inesperado en el que volver a casa fue el mayor regalo para sentirnos más cerca de los nuestros. Un tiempo en el que también nos tuvimos que recomponer y reinventarnos para hacerle frente a un septiembre incierto.

Recordaremos, aunque sin pena ni gloria, todos esos viajes que tuvimos que posponer. Porque lo que no pudo ser no tenía más vuelta de hoja. Pero nos sentiremos orgullosos de haber recorrido por primera vez, de punta a punta, nuestra comunidad, y afortunados de haber descubierto lugares que nada tienen que envidiar al paraíso.

Recordaremos este verano como aquel en el que tuvimos que ser pacientes y prudentes. Aquel en el que nuestra mayor ocupación consistía en protegernos a nosotros y a nuestra gente para poder disfrutar del próximo verano.