El temporal

Tú eras la roca que quedaba inmune, impasible ante el abismo.

Y yo un mal temporal, que azotaba tus costados para abrirme paso en mi camino.

Te impusiste ante el horizonte marcando los límites de mi tormento.

Y no quisiste darte cuenta de que tu composición, sin mi, no formaba ningún elemento.

Entorpeciste mi universo, amplio y liso, por eso no me he cansado de soplar hasta convertirte en tu forma más simple.

Tú eres grava.