aire

Aire

La salida no es más que una vía de escape. Un recorrido que emprendemos con la incertidumbre de lo que nos espera ahí fuera.

La salida solo la encontramos cuando nos quitamos la venda de los ojos, cuando decidimos romper con todo lo establecido.

Esa puerta no la abren los cobardes, sino las personas que comprenden que la vida nos se guarda en una habitación, que no hay que dejarla posar, sino dejarla libre para recordar que todo lo que un día estaba almacenado, ahora nos hace más fuertes.